No importa que tan guapa te veas, o que tan importante te llegues a sentir. Sos igual al resultado de la triste comedia de media noche.
Como esas playas que se han quedado sin conchas y están faltas de color. Como esos atardeceres hermosos llenos de contaminación rojiso. Y aquellos verdes campos que solíamos respirar en mitad de un beso imaginado.
El impulso de robarte un abrazo se a esfumado con las ganas de verte, mientras el café queda frío sin un dos menos uno que lo beba.
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